Los suelos de PVC para uso deportivo son un tipo de revestimiento especialmente diseñado para instalaciones en las que se practican múltiples disciplinas deportivas, garantizando rendimiento, seguridad y durabilidad.
La moderna base tecnológica permite crear pavimentos especialmente diseñados, con un grosor superior al de los pavimentos estándar de PVC, e incorporan una capa de espuma amortiguadora que aporta confort y seguridad a los deportistas.
¿Cuáles son las cualidades de los pavimentos deportivos de PVC?
La industria de los pavimentos deportivos evoluciona constantemente, y el PVC —aunque a simple vista pueda parecer un material limitado— ha sido perfeccionado para satisfacer los altos estándares que requieren las superficies deportivas.
Se introducen continuamente nuevos materiales en su fabricación, eliminando sustancias nocivas como el formaldehído. Además, se emplean componentes que confieren al pavimento propiedades antibacterianas.
De acuerdo con las exigencias técnicas para el deporte, y dependiendo de cada disciplina, se busca un grado óptimo de absorción de impactos. Esto ayuda a proteger las articulaciones, huesos y ligamentos de los atletas. También se garantiza un buen agarre, equilibrio, aceleración, calidad en el contacto con balones y otros equipos, y, sobre todo, se trabaja para minimizar el riesgo de lesiones.
Los pavimentos deportivos de PVC, según su grosor, pueden absorber entre 25 y 28 dB de ruido. Son resistentes al desgaste, duraderos y dimensionalmente estables. Se utilizan sobre todo en gimnasios, en áreas de cardio y aeróbicos. Destacan también por su aislamiento acústico, reduciendo el sonido generado por el movimiento. Su resistencia y durabilidad los convierten en una de las opciones más completas del mercado.
¿Para qué deportes pueden utilizarse los suelos deportivos de PVC?
Uno de los usos más comunes de los suelos deportivos de PVC es en gimnasios polideportivos diseñados para múltiples disciplinas de balón. Este tipo de superficies se encuentra habitualmente en pabellones escolares, centros deportivos públicos y universitarios. En estos espacios se practican deportes como baloncesto, balonmano, voleibol y fútbol sala. También se celebran partidos de relevos y entrenamientos durante el otoño e invierno, con el objetivo de mantener a los deportistas activos y en forma.
Cada deporte presenta requisitos específicos en función de su naturaleza, por lo que cuando se construye un pabellón orientado a una disciplina concreta, el suelo debe ajustarse lo máximo posible a las exigencias técnicas del mismo. Por ejemplo, una superficie destinada al tenis debe cumplir criterios que favorezcan el movimiento de los jugadores y la respuesta de la pelota al contacto con la pista.
Según las necesidades del deporte, se puede elegir un tipo de pavimento por su grosor, nivel de aislamiento acústico o por cumplir con los estándares técnicos requeridos. En los pabellones donde se practican deportes a nivel profesional, las federaciones deportivas —tanto locales como internacionales— suelen emitir certificados de homologación, validando el modelo de suelo que puede utilizarse oficialmente para la disciplina correspondiente.
Elegir un pavimento deportivo de PVC
El mercado actual ofrece una amplia gama de suelos deportivos de PVC (también conocidos como suelos deportivos de vinilo). Para hacer una elección adecuada, es fundamental conocer tanto las necesidades específicas de su proyecto como las características técnicas de los productos disponibles.
Los fabricantes permiten seleccionar entre una gran variedad de colores sólidos y acabados que imitan otros materiales. Además, cada opción presenta distintas propiedades técnicas que deben evaluarse cuidadosamente. Los precios pueden variar considerablemente según el tipo de suelo, el acabado y los costes de instalación por metro cuadrado.